El “puzzle” de la realidad transformado con maravillosas mentiras.

Damon Lindelof, guionista de "Lost", nos cuenta qué le impulsa a escribir

Damon Lindelof Uno de los artífices de la serie "Lost", no cuenta en este artículo cuáles son las razones que le llevan a escribir. Disfruten:

El otro día estaba escuchando las noticias en la NPR y me pasaron 2 cosas por la cabeza:

Primero: Sólo los idiotas sienten la constante necesidad de decirte que escuchan esa emisora de radio (¿alguien dice alguna vez : "Estuve mirando el canal CW la otra noche?") y creo que eso me convierte en un idiota.

Lo segundo es que estaba en medio de la historia en cuestión y finalmente me di cuenta del porqué escribo.

Es algo como esto: Hay una viejecita de 90 años llamada Rose, después de tocar varias veces la bocina al bus escolar estacionado frente a ella, decide que hay cosas muchos mas importantes que hacer y acelera su Honda Civic, alrededor del bus. Antes que se de cuenta que el bus estaba parado por una buena razón, Rose ve a un tren viniendo hacia ella y, casi instantáneamente, éste golpea del lado del pasajero del Civic y lo empuja una buena cantidad de metros, antes de poder frenar.

Obviando los detalles sangrientos, Rose es declarada muerta en el hospital y el doctor está ocupado notificándolo a su familia.
El esposo de Rose había fallecido hace décadas, pero ella tiene 2 hijos y una hija. El doctor llama a uno de los hijos y su esposa contesta el teléfono.

El hijo no está en la casa, pero la esposa se ofrece para tomar el mensaje. La ética del hospital es prohibir decir nada a quien sea, salvo al familar más cercano, acerca de la muerte de Rose, así que preguntan si el hijo estará pronto en su casa y que ellos volverán a llamar. La esposa responde: ´´Él no volverá hasta dentro de 2 meses´´. Y el hospital dice: ´´Bueno...usted tiene un número donde podamos localizarlo?´´. Y la esposa dice NO. Ella no lo tiene. Y porqué no?

Porque él está en el espacio.

En el espacio exterior. En órbita. Es uno de esos pocos seres humanos, que tienen la especial distinción de no estar en este maldito planeta.

El hijo, Richard, trabaja en la Estación Espacial Internacional, haciendo trabajos de reparación. Y está flotando en la Gravedad Cero, él está dichosamente ignorante de que su nonagenaria madre ha sido atropellada por un tren.

No lo inventé para ustedes. Esto pasó de verdad...

¿Y qué tiene que ver esta tragedia personal con el hecho de yo que escriba?

Porque para mi, esta es una historia fascinante: Y tan pronto como la escuché, mi cerebro está martillándome, sobre la escena donde los otros hijos de Rose, están discutiendo si se lo dicen, o no, a Richard.

La hija, Cristina, insiste en que hay que decirle que la madre falleció pacíficamente en su cama y reservar la terrible verdad, para cuando vuelva a la Tierra. El hermano, Michael, sin embargo demanda contarle todos los detalles escabrosos a Richard. Porqué? Porque es culpa de Richard que ella todavía estuviera manejando a sus 90 años. Michael estuvo tratando de ingresarla en un centro asistencial, hace 5 años años atrás, y si el maldito estúpido de Richard me hubiese escuchado, ella todavía estaría viva!

Afortunadamente, creo, la decisión no corresponde a su parentela. Él es, después de todo, un militar, así que esta es una cuestión de la NASA. Y hay unas líneas en el DPP (Protocolo de las Dos Plumas), que fue incorporado oficialmente este año, en el área psicológica de la NASA. Déjenme contarles...

En Septiembre de 2001, la estación espacial fue ocupada por 3 personas, un americano y dos rusos. Mientras estaban orbitando sobre el Noroeste de Estados Unidos, el americano llamó al Control de la Misión, para reportar que podía ver, a simple vista, dos pilares de humo masivo, emergiendo de la atmósfera. Cuando le responden, explicándole que el humo negro era el remanente de la Torres Gemelas, el americano se tomó una larga y penosa pausa y respondió: "Hubiera preferido que no me lo dijeras".

Como resultado del DPP, la Nasa comenzó a preguntar a los astronautas, quienes dejan el planeta con sus deseos personales, si están dispuestos a recibir notificaciones de tragedias. De esta manera, aparece un documento muy detallado, ya que cubre todo acerca de catástrofes mundiales, por ejemplo Katrina o un Tsunami, dejando de lado las cosas que afecten al astronauta, como que su madre fue pulverizada por un tren, y debe ser firmada y notariada antes de enviarlo. Porqué? Porque el estado emocional y la focalización de estos tipos es crítica. Ellos son enviados a misiones específicas en una estación espacial y después de gastar billones, Richard es una de las tres personas vivas con la experiencia para ejecutar estas reparaciones específicas, la última cosa que necesita la NASA es que vaya alguien con tristeza, el día que se supone deben arreglar el convertor de propulsión.

Entonces estoy sentado aquí, pensando como habrá llenado Richard su formulario de DPP... Y descubro que no hay tal cosa.

Me lo inventé.

Si, recuerdo haber oído algo acerca de los astronautas en la estación espacial, viendo una matanza en Manhattan, desde la órbita. Pero esto no tiene nada que ver con la historia de la muerte de Rose. De hecho, no se cuantos hijos tuvo, ni si ellos enviaron un mail a Richard (¿se puede enviar un mail al espacio?), y dejaron de lado todos los formalismos.

Pero, cuál es el drama en esto?

Así que esto es por lo que escribo:

* Escribo porque no puedo evitar crear cosas.
* Escribo porque amo contar historias.
* Escribo porque mi imaginación me impulsa a hacerlo.
* Escribo porque si no lo hiciera, sería un mentiroso patológico.
* Oh, y también escribo porque todavia estoy tratando que mi finado padre, se sienta orgulloso de mi.

Pero este tema, no es de vuestra maldita incumbencia.

Fuente: abcguionistas